Historia de Yair: Tiempos de Eva (Actualizado)

Antes de continuar les recuerdo mandarme sus fotos con cubrebocas para el experimento que Dani-el está haciendo, será divertido, anímense, aunque sea foto de celular.

Hace muchos años, tuve una novia de nombre Eva (creo que era Eva Deyadery), y bueno, la historia de cómo comencé a andar con ella es algo chistosa [música de cuento en que comienza a disolverse la escena actual]

Yo perseguía en aquél entonces los amores de una mujer llamada Marlene a quien apodaremos La Princesa, así pues me encontraba yo medio clavado con la Princesa y ella solamente se remitía a no pelarme y darme un poco de alas así pues un buen día me hice amigo de dos de sus amigas, de una porque un amigo quería con ella y de la otra porque pues estaba ahí y era cercana de la Princesa. El tiempo pasó y un día la Princesa dio una fiesta de Halloween hasta la chingada de lejos (al menos de donde yo vivo es lejísimos) es decir, allá por Iztapalacralapa, así que como yo no sabía como llegar, una de sus amigas se ofreció a llevarme siempre y cuando pasara por ella a su casa (al otro puto lado del mundo) allá por Ciudad Azteca, y así fue, recogí a la amiga y de ahí cruzamos la ciudad hasta la fiesta de la Princesa, en dicha fiesta Eva había estado bebiendo un poco, pero no al grado de vomitar y yo me estaba aburriendo hasta el cansancio de estar ahí lejísimos de mi casa y viendo a la pinche princesa besuquearse con su novio. (¿no mencioné que ella tenía novio? descuida, ella tampoco me lo mencionó cuando salíamos y la cortejaba, that bitch!) Así que después de un rato pero antes de que oscureciera (porque dicen que cuando se oculta el sol te roban hasta los tenis) la princesa y su novio hiciéronme el favor de llevarme a mi y a su amiga al metro para recorrer el D.F. hasta ciudad azteca. Y ahí estaba yo andando en metro con la amiga hablándome no sé que cosas hasta que escuché un: «no es que nadie se fije en ti, sino que no tienen el valor de decírtelo» yo me saqué de pedo pero me seguía haciendo el desentendido, después no sé que dijo y en un descuido, ¡zácatelas! que me agarra y me besa, estilo action movie, con el metro andando y la gente mirando.

Así fue como comencé a salir con Eva, la mujer que había bebido un poco para confesar su secreto amor por mi una noche en un vagón de metro. Eva fue la primera (y quizá única) mujer a quien le rechacé tener sexo. Sí, así es, pero no es como se imaginan, al poco tiempo de estar saliendo con ella (como al mes) fue su cumpleaños y dijo que de regalo quería que me comprara una cajita de condones y a darle átomos, yo pues le dije que nel, que se me hacía demasiado pronto (ah pero que inocente era yo en aquél entonces) pero ella dijo, que eso era lo que esperaba escuchar, que era una prueba que había superado.

Prueba superda que sólo me trajo unos meses después un «No eres tu, soy yo» y me mandó al diablo. Tiempo después me llamó como que buscándome pero yo me encontraba ya en Tiempos de la mala mujer (que es otra historia), asi que nunca más supe de ella…

Y bueno, en algún punto de mi vida me dieron ganas de llamarle y ver cómo le iba en la vida, no le guardo en verdad rencor ni nada, y me encantaría ir de vez en cuando a visitarla y jugar en su ring (no mal interpreten, su papá era luchador y tiene un gimnasio con ring de lucha libre), la cosa es que no puedo hallar nada para encontrarla, no la hallé ni en hi5 ni en facebook, no tengo su fon ni nada, sólo un vago recuerdo de cómo llegar a su casa, pero la verdad me da hueva ir hasta allá para que ya no viva ahí. Mi papá encontró en una vieja agenda un teléfono de casa, pero llamo y dice que está fuera de servicio.

Esa fue un fragmento de Historia de Yair, nada releveante pero quería compartir mi busqueda, si alguien sabe de ella, (jajajajaj cosa que dudo) díganme. Espero que mi proximo post ya sea en mi mac, no se despegen de la mistica espiral, pronto: Julieta II.