«No sé como será la tercera guerra mundial, sólo se que la cuarta será con piedras y lanzas.»
Albert Einstein.
Como ya es costumbre mía, los viernes los dedico a pasarla como el soltero que soy, perdón, como el soltero retraído y antisocial que soy (mejor, mucho mejor), así que asistí a la función de las nueve en punto para WALL-E, la más reciente producción de Disney y Pixar, si no la has visto y quieres verla, deja de leer porque aunque no contaré la película (puesto que no es un post de reseña) sí expondré algunas cosas que pasan y que quizá te gustaría ver sobre la marcha de la película y no en este post. En pocas palabras:
Warning Spoilers.
Siempre he tenido gusto por los escenarios post-apocalípticos, en cine, dibujos, historia, novelas, juegos, en fin, el ver al mundo conocido después de algún desastre masivo, hace que mi atención sea total, creo que comencé con Thundarr el bárbaro, una caricatura ya muy vieja que se desarrollaba en… (¬_¬) mejor vean el video:
Como les decía, desde esa caricatura nació mi fascinación por esos parajes post-apocalípticos, ver todo destruido, andar por la calle abandonada, edificios tirados y todo eso; WALL-E se desarrolla justo en uno de esos escenarios que me encantan: La tierra totalmente deshabitada y…
¡sí!, llena de basura y propaganda por doquier.
Imaginen un mundo sin seres humanos, imaginen que un día de la nada desaparece la raza humana (bueno toda forma de vida), ¿qué queda? ¿han pensado en lo que se deja como huella? olviden por un momento guerras, secuelas nucleares y todo eso, sólo concentren su mente en la basura, todo ese maravilloso mundo de cosas inútiles que serían la basura de ese momento. WALL-E es un robot recolector y compactador de basura, su misión: limpiar junto con más robots del mismo modelo, la basura de la tierra mientras una gigantesca nave llena de humanitos de va de crucero al espacio, para que al regresar, todo esté limpio y en orden, clásico en los humanos.
Bueno, pues WALL-E, único robot funcional de ese planeta tierra, tiene la afición de recolectar cosas que encuentra y con ellas ha ido aprendiendo cómo era la vida humana, encendedores, focos, cubiertos, en fin, cuanta cosa considera él y su poderoso procesador Power Pc (oh sí, WALL-E tiene Mac OS) importante. Bastante atractivo y divertido resulta toda esa aventura de WALL-E y el mundo jodido.
A lo que quiero llegar es a los humanitos, los de la nave espacial, resulta que pintan a la humanidad de una manera en verdad cómica pero creo que muuuuuy acertada: Todos somos gordos cuajados en sillas voladoras con pantallas frente a nuestras narices y todo lo realizan robots con I.A. no movemos nuestro enorme trasero para nada y todo alimento lo obtenemos de manera líquida en un vaso como los de ICE, con tapita transparente y popote.
Por un lado está bien, alta tecnología y tú te dedicas a disfrutar, pero un mundo donde los robots manden y no tengas sexo, ¡no señor!
Primero muerto antes que obedecer robots o ser virgen, aunque pensándolo bien, la raza humana es un verdadero caos y que HAL 9000 se encargue de destruirnos bajo argumentos ordenados y con verdaderos buenos fines, no está nada mal, habremos dejado huella con esas máquinas lo suficientemente inteligentes como para acabar con todos los problemas de raíz.
Me gusta pensar que un día despertaré y no habrá nadie en el mundo, ni un rastro de muerte, ni un sólo cuerpo, ni una sola cosa fuera de lugar, sólo yo y nadie más, y entonces, sólo entonces:
Tendré todos esos discos de música que no he podido comprar y beberé directo de la botella de cada artículo del centro comercial y tendré sexo ilícito en la iglesia, ¡Sí!
no, momento, dije que era el único, ¿verdad? ¡Me lleva! bueno, aún tengo tiempo para planearlo mejor para cuando de verdad suceda…
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Now playing: Honor – Znak Orla via FoxyTunes
Hace tiempo ya sostenía una discusión sobre la relación que hay con las drogas y la creación artística. El tema versaba sobre que muchas cosas de gran apreciación o genialidad, se conciben por el ser humano bajo el efecto de alguna droga. Todo esto saltó a mi mente pues en La vida en comic, Yair o mi representación en dicha tira cómica, está experimentando un viaje con LSD. A lo largo de mi existencia siempre me he mantenido al margen del drug abuse, tengo amigos que usan algunas, los he visto usarlas, me ha ofrecido y siempre he dicho no, mi política de I don’t do drugs es de mis más fuertes posturas. ¿Argumento? hay varios, me gusta citar primero a un pintor danés que nunca recuerdo su nombre pero decía: «Yo no uso drogas, mis sueños son lo bastante aterrorizantes», depués citamos al Mayor, con una parte de un poema que versa:»…yo prefiero mis viejos alucinantes: la soledad, el amor, la muerte».
Hoy de regreso a mi casa, me topé con la sorpresa de que andan vendiendo en el metro el nuevo disco de Luis Miguel, cosa que hasta cierto punto me tiene sin cuidado, pero me puso a pensar en esa dura lucha que se libra contra la piratería, Luismi solía ganar la millonadas de las ventas de sus discos, ahora, ganará menos porque te cuesta tan sólo diez pesitos en el metro, piensen en la cantidad de billete que está perdiendo él y todos los involucrados (la disquera) debido a que uno compra el disco al precio (que no sé cuánto cueste) y miles lo compren por diez pesos.
Este hecho es algo terrible para la industria musical, Luismi deja de ganar y su disquera también, de ahí que se intenta que se compre lo original, por otro lado y siguiendo con esta cosa de la piratería, al llegar a casa me topo en la red que Dave Grohl envió una carta a Metallica, en respuesta de su anuncio que invitaba a los jóvenes a comprar la música, la carta básicamente era para decir, «he sido fanático de Metallica desde que salió el Kill em all, y siempre voy y compro sus discos» eso es, no importa cuantos piratas haya y cuánta música descarguen, el que es fan, acudirá puntual a comprar su disco.
¿Qué hace la industria para combatir la piratería?
En algún tiempo usaban esas cosas de protección de copia, y antipiracy soft y no sé qué, por ejemplo, el disco de Thirteen Step de A Perfect Circle, tiene una etiqueta atrás de Copy Controled, y al meter el CD a la PC, corre su propio reproductor, una medida de seguridad que sirvió para dos cosas (nada y lo mismo) de igual manera lo vi piratón después. Entonces, ¿Cómo combatirla? Algunos artistas optaron por independizarse, lo cual los deslinda de los robos legales que las disqueras cometen y tienen libertad absoluta. Además de que con ello, se unen al avance tecnológico, por ejemplo Radiohead, su último disco costaba lo que tu quisieras dar, sí, así es, lo que fuera tu voluntad, podías meterte al sitio y descargarlo, pagando lo que tu quisieras, además podías comprar la versión física, si es que eres un flamante fan, pues tendrías tu edición impresa para presumir y colgarla e tu pared.
Trent Reznor es el héroe de esta historia, independientemente de que sea yo un fan from hell de NIN, es de apreciar objetivamente la cantidad de cosas que ha hecho a favor de la música, comenzó deslindándose de las disqueras, con lo cual el primer paso de crear Remix, un sitio en e cual podías subir remixes de rolas de los nin que hayas hecho y compartirlos con fans alrededor del mundo, además puedes descargarte las canciones en multitrack, para que las mezcles en algún programa de tu gusto o usando ableton o garage band, y por si fuera poco, no solo puedes descargar los remixes de los fans, sino algunos discos viejitos de los nin que ya no hayas en el mercado, como el Fixed, el EP de The Perfect Drug o el Things Falling Apart. ¿Quién descargará eso? FANS, por su puesto.
Después de Remix, trent se enojó con la disquera por el precio de su Year Zero, incluso dijo que con razón la gente no compraba música, que no era posible que su disco costara (digamos 20 dólares, porque no recuerdo el precio que dijo en verdad) y que uno de Avril Lavigne o britney costara 5 dólares, la respuesta de la disquera fue: «Pues sí, si no ponemos esos precios no se venden, además lo tuyo pongamos lo que le pongamos de precio, la gente lo compra porque eres tu». Ah, bonita respuesta, pero Trent no se sintió alagado, sino se encabronó y durante la gira (la ultima, ahí por Australia) en los conciertos llegaba a hacer una pequeña intervención para decir, «Con esos precios tan ridículos, ROBEN, vayan y roben el CD» y con justa razón, el quiere venderte la música, (con eso ya había comenzado en la era del With teeth, disco que salió en edición de cartón y sin booklet, este era descargable gratis en alta resolución desde el sitio, lo cual abarató el costo del disco, aquí costaba cien pesos en Walmart).
¿Qué pasó después? Ghost, Disco de NIN sin disquera, producido y todo por trent y su equipo, puede descargar gratis la primera de cuatro partes, pagar 5 USD por descargarlo todo, 10 USD por tu edición impresa con booklet, 75 USD por la edición de lujo o 300 USD por la mega de lujo (limitada a mil ejemplares los cuales volaron en el segundo día de preventa). ¿Que pasa aquí? Muy sencillo, si te gusta lo que hace tu artista, pagas lo justo, pagar 5 dólares por 36 tracks en formato de alta calidad para meterlas a tu ipod es u precio considero yo, perfecto, estás pagando la música, nada de impresión del disco, caja, etiquetas, papel, NADA, si quieres tus rolas para meterlas a tu iPod, ahí esta 5 dólares y ya, si eres fan y quieres tu disco, sale 10 USD y te enviamos tu CD a tu casita (gastos de envío aparte) pero es un precio que lo vale. Aquí todos ganan (bueno, la disquera ya no) el artista vende su música a un precio en el cual él gane, tú compras lo que quieras a un precio justo y lo pagas alegremente, todo legal, todo bien y sin problemas.
La misma dinámica esta ahora con The Slip, solo que el disco es gratis, todito, y en junio podrás comprar tu disco. Portishead está entrándole a esto de la música digital también. Hoy Justamente recibí del poderoso Royal Mail y luego del Estoico Correos Mexicanos, mi «disco» de Portishead.
No lo negaré, un día me topé el disco en la Web y lo descargué, pero cuando lo había descargado, ya había hecho yo mi compra de la edición limitada. Vaya cosa tan alegre fue abrir el paquete, una gran caja con 3 viniles un a impresión y el disco, bueno, el «disco» es una USB en forma de P, de un giga con las rolas y videos. Todo fan siente satisfacción al recibir esas cosas porque ES FAN. Yo descargo música, sí, pero no he dejado de comprar discos, si yo no compro mi disco no estoy de algún modo apoyando a que mi artista siga creando, realmente me gustaría que ya abrieran la tienda de iTunes store en México, y créanme, compraría las cosas que me gustan sin dudarlo.
La piratería no es imparable, si hay formas para irla disminuyendo, no compren pirata salvo que sea la última opción disponible, el ultimo recurso, bajen la película si no existe ni en amaron, o esa discografía del disco ultra raro inconseguible de ese artista ucraniano no reconocido, pero si pueden, compren las cosas que les gustan (a precio justo, claro.)
En fin, ya me extendí bastante, y para compartir mi alegría, aquí les dejo las fotos de mi recién llegado material y un videito del mismo.
